¿A qué se debe el atraso económico de América Latina?

sábado, 2 de octubre de 2010

Perdimos una nueva oportunidad

PERDIMOS UNA NUEVA OPORTUNIDAD COMO PAÍS !!!


La expectativa que generó el centenario de la revolución mexicana y el bicentenario de la guerra de independencia se quedó en los festejo patrioteros, en la morbosa intención del análisis de ADN de los llamados héroes de la patria. Bien hubieramos podido relanzar a nuestro país, tal como lo hizo Alemania en su proceso de unificación o como lo ha hecho China para acelerar su economía, pero no, todo se quedó  nuevamente en discursos pobres y vacíos. 
Bien pudimos haber logrado una verdadera integración nacional, pero no, seguimos teniendo el México de los indígenas olvidados, tenemos el México de los supermonopolistas y el México de la clase política insensata y dividida por su lucha irresponsable y avariciosa por la silla presidencial. Tenemos el México de los 40 millones de pobres y ni aun así fuimos capaces de aprovechar esta celebración para lograr acciones concretas. 


Perdimos una vez más una oportunidad histórica para darle, de una vez por todas, rumbo de largo plazo a nuestro país.


Tal vez tratar de imitar a las grandes potencias no es el camino que debemos de seguir. Pero mientras otros países estan descubriendo la ciencia que dominará el futuro, están conquistando el espacio o están desarrollando las tecnologías venideras, nosotros seguimos siendo un país changarrizado. Mientras en las universidades de otros países se forman los futuros líderes del mundo, nosotros seguimos produciendo millones de empleados "bien educados" para servir a las corporaciones extranjeras (si alguno tiene la fortuna de obtener ahí un empleo).


Perdimos una nueva oportunidad como país porque hoy es el tiempo del chapo, de la barbie y los zetas, es el tiempo de los gobernadores corruptos, de los legisladores mediocres, del show presidencial de los héroes muertos. Este fue el tiempo de las televisoras manipuladoras, de los bancos rapaces, de las telefónicas despiadadas y los charros sindicales.


Perdimos una oportunidad como país porque este debió haber sido el tiempo del México pobre, del México olvidado, del México de los trabajadores y de las amas de casa, del México de los jóvenes y de los niños, del México de los ancianos y madres solteras. 


Pero no fue así, fue el tiempo de las uniones entre homosexuales, del desempleo, del endeudamiento sinvergüenza de estados y munucipios, de la demogogia y de los discursos patrioteros que recuerdan con nostalgia el pasado pero que no tienen visión alguna del presente dramático y mucho menos del futuro. 


Tal vez, este momento histórico le quedó demasiado grande a los protagonistas.


Propongo, para aprovechar aunque sea en el cabus de este bicentenario, definir y actuar aceleradamente sobre los siguientes temas, con la ambición de crear un México unificado y más próspero:


1.- Reconciliación y perdón nacional.


2.- Lucha nacional contra el racismo.


3.- Formación intelectual basada en la innovación.


4.- Refundación de asociaciones, federaciones e instituciones deportivas.


5.- Desarrollo de tecnología de energía eólica, solar.


6.- Reforestación y recuperación de flora y fauna nativa.


7.- Refundación del sistema de gobierno y de la función pública.









No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.